El joven base, Lucas Vildoza, tuvo una irrupción explosiva en el segundo cuarto para encarrilar la historia. El equipo marplatense casi emparejó la línea de su vencido en la tabla.
Por Sebastián Arana
Empezó complicado. Pero una bestial aparición en escena de Luca Vildoza en el segundo cuarto le solucionó todos los problemas. Quilmes hizo suyo un duelo clave por la permanencia derrotando a un rival directo como Lanús por 94 a 68 por una nueva jornada de la Liga Nacional de Básquetbol. Así prácticamente lo alcanzó en la última posición de la Conferencia Sur. Y podría dejarlo atrás si el jueves vence a Libertad de Sunchales.
El comienzo para el conjunto local estuvo plagado de dudas. Casi en ningún momento del cuarto inicial logró plantar una defensa seria y Lanús la atacó con naturalidad. Con los rompimientos de sus extranjeros, también con el apoyo de algún tiro exterior.
El buen arranque de Baxley, autor de diez puntos en el primer cuarto, quedó minimizado por las falencias anteriores. A Cequeira se lo veía atado y poco aportaban para la causa Ruiz, Calvi -de nuevo inicial en lugar de Maciel- y Gallizzi.
Sin embargo, bastó que Ramella ordenara los ingresos de Maciel y Vildoza para encarrilar el partido. Lanús, que llegó a ir ganando por seis puntos (22-16) y que se llevó el cuarto inicial por 24 a 20, enseguida vio como Quilmes le igualaba con sendas bombas de los ingresados en el arranque del segundo cuarto.
Pero esos aciertos no fueron fugaces. En primer lugar, estuvieron respaldados por una mejora defensiva sostenida. Lanús dejó de jugar con la comodidad de la primera parte y la rotación -salvo Stewart- poco le aportó. A punto tal de que su producción ofensiva se vio limitada a nada más que once puntos en el parcial 2.
Más allá de esa superación en su propio canasto, la monumental producción de Vildoza inclinó la balanza hacia el lado quilmeño. El pibe le cambió la cara a la ofensiva de su equipo con sus rompimientos y su puntería, además de capturar cinco rebotes. Anotó 17 de sus 19 puntos de la primera parte en ese segmento del partido y Lanús fue impotente para detenerlo a él y a la escapada quilmeña.
Con los mismos del comienzo desde la reanudación, Quilmes manejó la diferencia. Lanús ya no lo tuvo a Millsap con el nivel del comienzo y la buena tarea de Green no le alcanzó para remontar la cuesta.
El equipo local repartió mejor los protagonismos de su ofensiva, aún cuando Vildoza volvió al partido promediando el tercer parcial, y así no tuvo el menor contratiempo. Con sólo dos puntos suyos (una asombrosa cabriola en el aire para cerrar el tercer parcial) y cuatro tiros libres de Baxley, pero con mayor incidencia de sus internos y con el respaldo del tiro abierto del resto, los de Ramella ingresaron al cuarto final ganando 69 a 51, con casi todo definido.
El último cuarto fue la excusa para ver algunas acciones espectaculares más de un Vildoza incandescente, quien probablemente haya jugado su mejor partido desde que está en la Liga. Y para ver debutar a otro hijo e’ tigre: Juan De la Fuente.
Síntesis
Quilmes 94
L. Cequeira 7, W. Baxley 22, E. Ruiz 3, F. Calvi 2 y T. Gallizzi 8 (FI); M. Maciel 10, D. Romero 8, L. Vildoza 32, E. Spalla 0, B. Sansimoni 0, J. De la Fuente 2 y E. Iñiguez 0. DT: Leandro Ramella.
Lanús 68
J. P. Cantero 7, P. Rodríguez 8, R. Green 13, J. Millsap 11 y O. Cantón 10 (FI); D. Stewart 6, P. Bertone 6, F. Zárate 4, J. Fernández Chávez 0, L. Díaz 2, F. Gago 1 e I. Gramajo 0. DT: Fabio Demti.
Estadio: Once Unidos.
Arbitros: Sergio Tarifeño -Leonardo Zalazar.
Parciales: 20-24, 46-35 y 69-51.